viernes, 2 de junio de 2017

Antonio Mairena y el misterio de las soleares de Paca Aguilera

Por Jose Morente

La gran cantaora rondeña Paca Aguilera (Fotografía del archivo de José Blas Vega)

Que los grandes cantaores (y eso vale para cualquier profesión) no se dan cuartelillo, es una verdad como un templo. Baste como prueba este texto de Antonio Reina sobre Antonio Mairena:
"Recuerdo otra tarde en que había venido a casa para oír unos discos que había conseguido. Uno era de Paca Aguilera, que interpretaba unas soleares de Triana que a mí me impresionaron, pero le pregunté por ella y me dijo que Pastora le había dicho que era una cantaora del montón. Yo, la verdad, me quedé … . Pero aquel día, después de estar escuchando a Juanito Mojama, metí el disco de Paca Aguilera. El estaba, como siempre, abstraído, metido en sus pensamientos, sonó el primer cante por soleá y apenas le echó cuenta, pero cuando apareció el segundo:
"A una montaña me llevaras,
vamos donde tú quieras
que el cariño todo lo allana."
se le descompuso la cara, se levantó como un resorte y me preguntó que quién era. Le dije que Paca Aguilera, y su única respuesta fue: "otra vez me ha engañado Pastora". Me hizo incluso que se lo grabara aquella tarde. A Antonio en el cante no lo engañaba nadie, y siempre fue con la verdad por delante. Incluso llegaba a distinguir un hecho tan importante como que una cosa era sonar gitano, y otra muy distinta, cantar gitano".
Dejando al margen el "engaño" de Pastora, lo que está claro es que, el cante de Paca Aguilera, impresionó gratamente a Mairena. Por eso, lo mejor que podemos hacer es escucharlo y disfrutarlo también nosotros.

Una melodía por cierto impresionante como podemos comprobar en esta grabación de la gran cantaora de Ronda.

Una grabación que contiene una agradable sorpresa, pues además del cante de Paca Aguilera, se incluyen de fondo unas imágenes filmadas en la ciudad de Ronda en 1929 y, dentro de esas imágenes, aparece, tocando la guitarra, Aniya la Gitana. 

De la gitana de Ronda, Aniya, conocemos fotos y entrevistas.

De Aniya conocíamos fotos pero no películas. No conocíamos... hasta hoy.




El cante de la rondeña es magnífico, aunque no vaya sobrado de cuadratura pues, en esas grabaciones, como me explicaba Antonio Hermosín hace un par de días,  el cante va por un lado y la guitarra por otro.

Lo cierto es que, en este tema del compás, no es algo en lo que destaquen, en general, los cantaores del pasado. Pepa Sánchez Garrido en su magnífico libro "Cante y cantaores Triana", analiza magistralmente esta cuestión y señala que, en temas de compás, no podemos tomar como referencia a esos artistas de antaño "pues a la dificultad de dominar el compás por parte del cantaor se unía una técnica primitiva y rudimentaria en el acompañamiento de la guitarra junto a otras limitaciones técnicas del propio registro sonoro". 

Eso de las limitaciones del propio registro sonoro se refiere a la compleja forma de captar el sonido en los primeros aparatos de grabación (Fotografía de grabación de orquesta en estudio en 1924. El embudo es similar al que se usaba en los primeros fonógrafos y también en los aparatos con los que se grabaron los primeros cilindros de cera de cantaores flamencos)
Pepa acaba afirmando que "muchos de los cantaores profesionales primitivos no cuadraban el cante -ya fuera por incapacidad rítmica de los mismos o de sus guitarristas acompañantes". Lo que dice de los profesionales (la no cuadratura de los cantes) vale también, y se acentúa lógicamente, en el caso de los cantaores aficionados.

Cuestión distinta es la línea melódica del cante, línea que, en el caso de las soleares de Triana, presenta una gran belleza y dificultad, como han resaltado todos los que se han acercado a esos cantes, tanto por su extensión melódica como por su extremada ligazón. Y como hemos podido comprobar en la grabación de Paca Aguilera.

Eso línea melódica fue probablemente, lo que llamó la atención de Antonio Mairena y lo que le hizo reaccionar emocionado ante el cante de la rondeña pues, como me decía también Antonio Hermosín, el maestro siempre andaba a la caza de nuevas melodías.

Lo curioso es que este cante por soleares que tanto le gustaba a Mairena, se le resistía al cantarlo. Curioso porque al cantaor de los Alcores, uno de los más largos -si no el que más- de la historia, no se le resistía casi ningún cante. El testimonio es de Antonio Reina y la referencia, que me facilita Luís Soler, se encuentra en el interesante libro "El Flamenco en Ronda y su Serranía" de Gabriel Olea y María de la Paz Tenorio:
"Antonio Mairena que tantos cantes asimiló y recreó, le dijo textualmente [a Antonio Reina] sobre la soleá que cantaba Paca Aguilera: ¿Qué tendrá está soleá, que donde quiera que voy está conmigo? La repito una y mil veces pero soy incapaz de hacerla como es. ¡Ahí está el misterio del cante y su grandeza! ¡A mí que nunca se me ha resistida nada cantando!"
La soleá a la que se refería Antonio es la segunda de las tres que canta Paca Aguilera en la grabación que hemos escuchado, tal y como me confirma Manuel Martín Martín, quien añade que se suele cantar con la siguiente letra:

  “A una montaña me llevaras,
vamos dónde tú quieras
que por dinerito no lo hagas”.

Letra que, lógicamente, se modifica al cantar como hace Paca Aguilera en su cante y cuyo primer tercio sería "(A viv)ir a una montaña...", comiéndose las dos primeras sílabas pero manteniendo el sentido de la copla. Y es que otro tema interesante es el de las transformaciones que hacen los cantaores para acoplar las letras al cante sin desvirtuar los textos, algo que no siempre se consigue. 

Resumiendo todo lo dicho, nada mejor que acabar citando lo que decía Antonio Mairena, al hilo de estas soleares de Paca Aguilera:
El misterio del cante y su grandeza...!"
Antonio Mairena. Un cantaor al que se le resistían muy pocos cantes (Foto Colita) 

1 comentario:

Anónimo dijo...

interesantísimo documento de la historia del flamenco,valiente la solea de paca,la verdad independiente de la guitarra,creo que el toque , se perfecciono algo después, con sabicas , los estudios de grabación de lo más original, el comentario de Mairena sobre la niña de los peines, de lo más veraz, abrazo, Manuel Vázquez