Enriqueta Reyes Porras “La Repompa” (1937-1959) era una cantaora de la calle Puente del barrio del Perchel de Málaga, muy guapa y muy gitana que por suerte llego a grabar 7 cantes en 2 Extended Play de los de vinilo de entonces (los editó el Flamenco Vive en CD junto con otros cantes del Chaqueta hace unos años) y que por desgracia falleció demasiado joven a los 21 años víctima de una peritonitis, cuando no había dado ni la décima parte de lo que pudo llegar a dar al flamenco.
Cantaba con ángel y con arte. Con mucho arte. Aprendió cosas de la Pirula de Málaga (la madre de la Cañeta), pero otras eran suyas propias.
En todo caso, como decía Paca Reyes (la hermana mayor de la Repompa) en una entrevista reciente e inédita con Ramón Soler (quien ha tenido la gentileza de permitirnos reproducir algunos párrafos):
“Ese ángel que tenía esa no hay quien lo tenga: porque es que bailaba, cantaba y después de cantarle, esa simpatía. Levantaba sus brazos y tenía que morirse una viéndola. No era ni de piernas ni ná. ¡Yo qué sé!”
La Repompa grabó tangos en dos ocasiones. Son tangos del barrio del Perchel, porque como también decía la Cañeta en otra entrevista también inédita con Ramón Soler:
“En el Perchel había un aire mu bonito, mucho ángel, mucha gracia; y calle Los Negros también estaba sembrá, que eran más de bulerías y en el Perchel éramos más de tangos, las niñas siempre por tangos, había también bulerías pero menos”
Los primeros tangos de Málaga que grabó son los que incluyó con ese título en su primer EP en 1958.
Según Ramón Soler, la 1ª y 4ª coplas son tangos granaínos. La 2ª “La que quiera madroños” corresponde a un cante de la Pirula que tiene cadencias parecidas a los tangos extremeños. La 3ª copla, es un cante que la Repompa aprendió de su hermana mayor Paca y la letra es de un Fandango de Pepe Pinto. La música “remea” mucho a los tangos de Granada.
Cierra con el “yeli” o estribillo de las bodas gitanas.
La guitarra de Paco Aguilera acompaña de forma perfecta el cante.
Tangos de Málaga (1958)
La Repompa-Guitarra: Paco Aguilera
Tú roneas porque vales,
tú eres la piedra más chica
de la acera de mi calle.
La que quiera madroños
vaya a la sierra,
ole morena,
porque se están secando,
ole morena
mi madroñera.
En el cristal de mi copa
tu cara se reflejó,
y aquel poco de licor
que yo me llevé a la boca
de veneno me sirvió.
¡Mientes como hay Dios,
mientes como hay Dios!
Ponte guapa Mariquilla,
te voy a llevar esta tarde
a la feria de Sevilla.
Yali yali, yali, yali, ya.
También incluyó unos tangos en su segundo EP, esta vez con la denominación de tientos.
La primera copla (la famosa “Dios mío dame pacencia”) es un tango de la Pirula. Muy original y que recuerda las bulerías por soleá de la Moreno.
El segundo cante (“Mamá, mamá, no quiero eso”) también es de la Pirula. Lo ha grabado luego Estrella Morente.
El último es un tiento del Campo de Gibraltar.
(En el video sigue una bulería por soleá, en realidad bulerías)
Tientos (1959)
La Repompa-Guitarra: Paco Aguilera
Dios mío, Dios mío,
Dios mío dame pacencia,
pa bregar con este gitano,
me falta la resistencia.
Mamá, mamá no quiero eso
mamá, mamá no quiero na,
quiero que vengas a verme
de tu propia voluntad.
Que tenga rejas de bronce
la cárcel que a mí lleven
que tenga rejas de bronce
para cuando vengas a verme
que de mi cuerpo no goces.
Curiosamente, la Repompa sigue de rabiosa actualidad. Sus tangos “Dios mío, dame pacencia” (cantados por las Migas) fueron utilizados en la publicidad de IKEA del 2010.
Hace poco años y después de tres de trabajo, Paco Roji (agitador cultural y responsable de la tienda Flamenka) y Paco Fernández han presentado un documental imprescindible sobre la cantaora perchelera.
Actualmente preparan con la colaboración de Ramón Soler un libro sobre esta figura del cante gitano que esperamos con interés.
La Repompa
2 comentarios:
Hola José:
Felicidades
Y por otro lado hoy hace justo un año que se publicaba este artículo
Ya está el libro sobre ella en la calle.
Escrito junto a Ramón Soler y Paco Fernández
Paco Roji
Paco:
Anque de la Repompa ya se dijo algo en el blog, habrá que volver sobre ella y que mejor motivo que a partir de vuestro excepcional libro
Un abrazo fuerte (y ánimo)
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