martes, 31 de diciembre de 2013

Un uvero llamado Caracol

Por Jose Morente

NAC_GEN_web_17 - copia

Un uvero de lujo. Manolo Caracol

La tradición de nuestro País exige tomarse doce uvas al son de las campanadas de Nochevieja. Una uva por cada campanada.

Para poder cumplir la tradición es necesario por tanto, con carácter previo, comprar las necesarias doce uvas. Y nada mejor que comprárselas a un buen uvero. En este caso, a un uvero llamado Manolo Caracol. ¡Casi ná!

Caracol canta con su solvencia habitual el Pregón del Uvero. Un uvero que vende uvitas frescas y maduras con una voz clara, limpia y gitanísima.

Como decía Luis Soler al hablar de la garganta del sevillano y de su flamenca forma de expresarse “nunca una voz tan gitana encontró mejor intérprete”.

Con esa voz –tan sobrada- y con la su hijo Enrique Ortega, despedimos este año 2013. Que el próximo nos sea propicio a todos.

 

Lo mejor de Manolo Caracol - Frontal

Los pregones de la uva se ha incluido en numerosas reediciones de los cantes de Manolo Caracol

 

 

Pregones de la uva

Cantan: Manolo Caracol y su hijo Enrique Ortega

 

Voz de Manolo Caracol: Los uveros de los Palacios ¡A ver a quien le compran, esas mujeres guapas, uvas! ¡A Enrique o a mí!

Hasta las flores que hay en tu pelo
me huelen niña a terciopelo
ay, que pelo
el uvero (E.O.)

Vuelve la cara repara y mira
que vale mi carga más que su viña
el uvero endeble (M.C.)

Uvitas negras de los Palacios
comen las niñas dulce y despacio
el uvero (E.O.)

La Virgen la Esperanza
ha regaíto mi viña
Esperancilla sal a la puerta y sal
y cómprame el vino que es muy bueno
el uvero (M.C.)

Campanas de Carmona

Las campanas de Carmona (las que no tienen tan buen sonío como tiene tu persona) dispuestas para dar las doce campanadas mientras no comemos las uvas de la nochevieja.

martes, 24 de diciembre de 2013

Villancicos flamencos (XVII) Madroños al niño

Por Jose Morente

 

Amós - copia

Amós Rodríguez Rey. Hermano del Beni y nieto del Niño de la Isla.

La serie Rito y geografía del cante dejó grabada para la posteridad, un buen número de horas de cante y toque de los mejores flamencos de la época.

Pasaron por dicha serie, las grandes figuras del flamenco (Mairena, Caracol, Marchena, La Paquera, La Fernanda y La Bernarda, Camarón, etcétera) y también una pléyade de artistas menos conocidos por el gran público pero sobre cuya enjundia no cabe dudar (y que iban desde una jovencísima Macanita hasta cantaores mucho más ancestrales, por no decir añejos,  como el Viejo Agujetas o el inconmensurable Borrico de Jerez)

Uno de los cantaores que pasó por la serie nos llamó poderosamente la atención. Se trataba de Amós Rodriguez Rey, descendiente del Niño de la Isla (cantaor de San Fernando que vivió a caballo de los siglos XIX y XX) y hermano del Beni de Cádiz.

Amós era un cantaor no profesional (con pintas de abogado más que de flamenco) y aficionado cabal que se presentaba, para esta ocasión, en el burgués escenario de su propia vivienda escoltado por su mujer y su cuñada (entre otros familiares) ambas con un look y un tocado propios de la época que haría las delicias de los estilistas más modernos.

familia de Amos

La mujer y la cuñada de Amós acompañando su cante por Villancicos

Una “puesta en escena” muy llamativa para unos cantes no menos llamativos, entre los que destacaban unos curiosos villancicos cantados con sumo gusto y elegancia. Unos villancicos que ya le había grabado Caballero Bonald para su imprescindible Archivo del Cante de Vergara (el precedente en audio de Rito y Geografía). La letra es de traca.

Como, esta vez, no se trata sólo de oír sino de ver, traemos a este blog un fragmento del capítulo correspondiente. Precisamente, el que corresponde a los villancicos.

 

San José ha tomao celos (Villancico)

Amós Rodríguez con la guitarra de Manolo Brenes. Rito y geografía del cante (Programa emitido en TVE el 25 de diciembre de 1972)

 

 

San José ha tomado celos
del preñado de María
y cuando nació el lucero
la baba se le caía

Madroños al niño
no le demos más
que con los madroños
se va a emborrachar

La Virgen iba subía
en la jaca de los pollos
y San José iba detrás
dándole al niño madroños

Madroños al niño
No le demos más
Que con los madroños
se puede emborrachar

La Virgen como es gitana
a los gitanos camela
San José como es gachó
se rebela, se rebela

Madroños al niño
No le demos más
Que con los madroños
se puede emborrachar

La Virgen era gitana
y San José era gachó
se ha casao con la Virgen
gitanitos son los dos

Madroños al niño
No le demos más
Que con los madroños
se puede emborrachar

Que sí, que no
María se llama
la Madre de Dios


 

Regalo navideño

Y de regalo navideño otras estrofas de este simpático Villancico que Amós solía también cantar (se incluyeron, por ejemplo, en la grabación que hizo para el Archivo del Cante de Vergara).

San José hizo un guisao
pero no le echó tomate
y la Virgen le decía
si lo pruebo que me maten

El niño Dios se ha perdió
su mare lo está buscando
y está en la orilla del río
de juerga con los gitanos

La mula le gruñe
Y el buey le bajea
Y el niño de Dios
dormido se queda

lunes, 23 de diciembre de 2013

Villancicos flamencos (XVI) Los campanilleros de Manuel Torre

Por Jose Morente

 

1928-00-00 Manuel Torre 01 (Copia)

Manuel Torre. Chacón le llamaba –cariñosamente- mi majareta por sus rarezas y extravagancias.

 

El “majareta” un cantaor genial

Si ha habido un cantaor genial en la historia del Flamenco, ese es Manuel Soto Loreto (o Leyton) “Manuel Torre”, jerezano del barrio de San Miguel. Dato nada banal pues en Jerez ser de San Miguel o de Santiago (el otro barrio flamenco por excelencia) imprime carácter.

El Torre fue el arquetipo de cantaor enduendado, carismático, imprevisible y genial (Ya he utilizado el adjetivo genial 3 veces y lo utilizaré alguna más antes de acabar la entrada, por si quedara alguna duda). Algo así como un Rafael el Gallo del flamenco, capaz de pasar, en un momento,  de las mayores chapucerías a las notas más altas del sentimiento. Y viceversa.

 

Lo cuenta el Niño Ricardo

Una de esos notas altas, se produjo una mañana en Las Siete Puertas de Sevilla, al salir de una juerga flamenca en la que estaban con el Niño de la Palma, el padre de Antonio Ordoñez, artistas de la talla del Gloria, Rebollo

 

Cayetano con Malena 002

Imagen de otra fiesta (esta vez en el sevillano Pasaje del Duque) en la que también se reunieron Cayetano Ordoñez “Niño de la Palma”, El niño Gloria y Manuel Torre. 

Entonces mandaron a llamar a Manuel Torre que vivía en el Fontanal. Llegó Manuel y le dijo al Niño Ricardo que le pusiera la guitarra en el tres…

“…y escuchamos aquellos campanilleros, inspiración de su genio, que ponían los vellos de punta”.

Y añadía Ricardo:

“Lo mismo hubiera podido pasar lo contrario, que nos hubiéramos pasado la noche esperando un cante bueno, mientras Manuel no hacía más que mirar el mechero el reloj, que eran dos de sus manías…”

 

 

Sonifolk Manuel Torre frontal (Copia)

 

A la puerta de un rico avariento (Campanilleros

Manuel Torre – Guit.: Miguel Borrull hijo

Gramófono, 1929 (reeditado Sonifolk, 2000)

 

En 1929, Manuel Torre grabó para la casa Gramófono y con la guitarra de Miguel Borrull hijo estos campanilleros fruto de su inspiración. Aunque la grabación conserva algo del ruido de fritura, propio de las placas de pizarra, el resultado final (gracias a la limpieza digital del técnico Andrew Walker para Sonifolk) es de lujo.

 

Voz: ¡Anda Manuel canta los campanilleros que yo no te lo he escuchao!

 

A la puerta

a la puerta de un rico avariento

llegó Jesucristo y limosna pidió

y al igual que darle la limosna

los perros que había se los azuzó

Y Dios permitió

que los perros al pronto murieran

y el rico avariento pobre se quedó

 

Dos pastores

Dos pastores corrían p’a un árbol

huyendo de una nube que se “alevantó”

cayó un rayo. A nosotros nos libre

y a uno de ellos lo “acarbonizó”

Pero al otro no

que llevaba la estampa y reliquia

de la Virgen pura de la Concepción

 

Si supieras

Si supieras la entrada que tuvo

el Rey de los Cielos en Jerusalén

que no quiso coche ni calesa

sino un jumentito que “alquilao” fue

Quiso demostrar

que tan sólo las Puertas del Cielo

Divinas las abre la Santa Humildad

domingo, 22 de diciembre de 2013

Villancicos flamencos (XV) Corrococo, co

Por Jose Morente

13 (Copia)

Manuel Moreno Jimenez “Morao”

Manuel Morao y los jueves flamencos. Marketing del bueno.

Cuando Manuel Morao volvió a Jerez, a mediados de los 60 y después de haber acompañado por medio mundo y durante una década a Antonio el Bailarín,  junto a artistas de la talla de Chano Lobato, Sernita o el propio Antonio Mairena, tuvo la ocurrencia genial de organizar unos jueves flamencos en los que hizo debutar, junto a figuras consagradas, a muchos de los que hoy han hecho carrera en este difícil mundillo del flamenco.

Después de acompañar a su concuñado el genial Fernando Terremoto, en casi todas sus grabaciones, Morao volvería por tres temporadas más a la compañía de Antonio, creando a su vuelta a Jerez, la denominación de origen “Gitanos de Jerez” un magnífico producto de marketing exportador del mejor flamenco.

manuel-morao-terremoto-jerez

Manuel Morao y Fernando Terremoto. Jerez en estado puro.

Una de las producciones de ese empeño fue la publicación en disco de una actuación del grupo jerezano dirigido por Manuel Morao, que tuvo lugar en el Teatro Central de Sevilla, el 28 de diciembre de 1996. Una Nochebuena flamenca.

De esa Nochebuena flamenca de Jerez en Sevilla, entresacamos uno de los cortes: el “corrococo”´, un curioso villancico profano dedicado a glosar las penurias y las hambres que se pasaban por estas tierras hace décadas y que hacían perder la compostura al “vecino” más pintado. Penurias que vuelven a repetirse por la rapiña de unos y la ineptitud de los otros.

A ellos, a los responsables de esta situación, les “dedicamos” estos villancicos.

la foto (1)

 

Corrococo (Villancico flamenco)

Manuel Morao & Gitanos de Jerez, S.L. (1997)

Cante: Carmen la Cantarota y Macarena de Jerez/ Guitarra: Antonio Higuero

 

 

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Vecinita, vecinita (bis)

vecina la del rincón

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

No ha visto usted mi gallina (bis)

que ayer tarde se perdió

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Que gallina ha dicho usted (bis)

si no la conozco yo

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Y el marío de mi vecina (bis)

en el pozo la escondió

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Y el muy tunante quería (bis)

Comérsela con arroz

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Yo no siento mi gallina (bis)

ni el dinero que costó

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Lo que siento es el pollito (bis)

que sin madre se quedó

Corrococo co. Corrococo co (bis)

 

Sacando agua del pozo (bis)

la gallina dijo: Co

Corrococo co. Corrococo co (bis)

domingo, 15 de diciembre de 2013

¡Ya se besan los toreros!

Por Jose Morente

Beso torrero de Yipi yipi Yeah en calle Augusto Figueroa Madrid

Arte urbano en Madrid. Beso torero de Yipi-yipi-yeah en la calle Augusto Figueroa

El trato de los toreros antiguos

Desconciertan al aficionado de hoy, y mucho, las buenas relaciones que tienen entre sí los toreros de ahora, muy efusivos y campechanos entre ellos, aunque sin llegar al extremo de la imagen urbana que inicia esta entrada, cuando se encuentran en la Puerta de Cuadrillas.

Algo muy distinto al trato que tenían los toreros de antes. Y es que incluso cuando mantenían amistad entre ellos se cuidaban muy mucho de demostrarlo ante sus partidarios en el convencimiento de que nadie lo entendería.

Por eso y por ejemplo, José y Juan, cuando viajaban, se separaban al llegar a las estaciones para que sus partidarios no les viesen juntos como cuenta el propio Belmonte al periodista Chaves Nogales

1912-12-00 Joselito y Belmonte encuentro dic 12 (p. Mundo Grafico 12-1912)

Primer encuentro de José y Juan (Foto publicada en Mundo Gráfico en diciembre de 1912)

La buena relación de José y Juan fue trasunto de la que antes habían mantenido Lagartijo y Frascuelo, quienes habían estrechado una fuerte amistad después de muchos años de lucha.

Pero no siempre, la relación entre los toreros punteros fue tan idílica. Al contrario, lo habitual era y es no dejarse ganar la pelea por nadie dentro de la plaza y a veces tampoco fuera.

 

Joselito el Gallo contra Bombita

En este sentido, el caso más paradigmático fue, posiblemente, la rivalidad, dentro de la plaza, de Joselito el Gallo con Ricardo Torres Bombita. Joselito no se dejaba ganar la pelea por nadie, así fuera familiar suyo, pero su inquina hacia Ricardo Bombita alcanzó tintes muy fuertes.

El menor de los Gallos había conocido de chico las supuestas afrentas  hacia su hermano Rafael de Ricardo Torres, a quien hacía responsable de los malos derroteros de la carrera del Divino Calvo, y se juró que le vengaría.

1913-09-08 TKL Bombita y Gallo 1

Bombita y el Gallo en 1906. El grande abusa del pequeño según la caricatura del The Kon Leche del 8 de septiembre de 1913 o, al menos, eso es lo que pensaba Joselito.

Por eso, cuando Gallito tomó la alternativa dedicó su primera temporada como matador a echar del toreo a Ricardo Bombita.

RicardoTorresBombitaArt289

Ricardo Torres (a) Bombita

Como Joselito podía ser muy duro, pero fue siempre muy justo, marchó en busca de Machaquito, la pareja torera de Ricardo, y le espetó a bocajarro:

¿Cuando se retira usted? Porqué como sé que es tan amigo de Rafael mi hermano, no quiero hacerle daño a usted. Vengo al toreo para ser el amo y quiero que sepa que no vengo a por usted, sino a por Bombita. Le quiero anular por todo el daño que ha hecho a mi hermano Rafael.

Machaquito quedó sorprendido y molesto de que siendo él una figura del toreo viniera un mozalbete de 18 años a decirle eso. Cuando pudo se fue en busca de Rafael a contarle lo que le había dicho su hermano.

Sí, Rafael. Eso es lo que me ha dicho tu hermano…. O es un atrevido o es un genio.

La respuesta del Gallo fue tajante:

¡Es un genio

A final de la temporada de ese año de 1913, se cumplía la profecía y Bombito se retiraba de los ruedos ante el empuje de Joselito. Días después Machaquito seguía sus pasos.

En la tarde de la despedida de Bombita, todavía Joselito no acababa de darle tregua al de Tomares y, en el último toro, le ofreció  banderillas a Bombita, pese a que este le había pedido expresamente que no lo hiciera:

José. Yo ya he acabado mi carrera. Así que no me ofrezcas banderillas en el último toro.

Haciendo caso omiso, José puso en ese  compromiso no deseado a Bombita quien colocó un gran par pero el de Gallito fue sensacional.

Lo vemos. Joselito (de oscuro) ofrece los palos a Bombita (de claro)

 

 

Dentro… y fuera de la plaza

La enemiga de Joselito contra Bombita tenía lugar no sólo dentro de la plaza sino también fuera de ella, por eso cuando torearon en la Feria de Sevilla del 13, los Gallo y los Bomba, Joselito gritó al pisar el albero de la Maestranza:

¡El mejor torero es éste –dijo señalando a su hermano- y después, yo!

Después de la corrida hizo que el cochero le llevara a la casa de Bombita en la calle de los Reyes Católicos. Puesto de pie en el estribo, gritó (años antes de que la frase la patentara Luis Miguel Dominguín):

¡El número uno soy yo!

Ordoñez nº 1 (1)

Lo del número uno no es nuevo en el toreo. Antes de Luis Miguel Dominguín, ya lo había reivindicado Joselito para sí mismo. Después de Luis Miguel los partidarios de Antonio Ordoñez le regalaron al maestro de Ronda ese “uno” con el nombre del torero para que no hubiera lugar a dudas sobre quien ostentaba la primacía del toreo de la época.

Incluso ya retirado Bombita, José seguía buscándole las vueltas.

Una mañana en la que iba con Camará por Madrid camino de Lhardy le paró un chavalillo pidiéndole una peseta:

¡Deme una peseta que es usted el mejor torero del mundo!

Joselito riéndose le contestó.

No. Toma mejor un duro pero ve a decírselo a aquel señor que va por allí.

Cámara se quedó frio cuando vio que el señor al que se refería Gallito era Bombita, que llevaba ya tres años retirado.

 

La venganza de Bombita

La pelea de Joselito contra Bombita le vino de perlas a Juan Belmonte quien –de rebote- heredó a todos los partidarios de Ricardo aunque los estilos de torear de ambos estaban en las antípodas.

1913-10-12 Barcelona Banquete a Bombita

En octubre de 1913, un nutrido grupo de bombistas participaba en un homenaje de despedida al diestro de Tomares. Los partidarios de Ricardo pasaron a engrosar en bloque las filas del belmontismo.

De toda esta historia nos queda la lógica imagen de un Joselito jovenzuelo, vengativo y antipático frente a un  Ricardo Torres Bombita caballeroso y simpático. 

Demasiado esquemático para ser cierto. NI Joselito era tan irritante como lo muestran estas anécdotas tan difundidas ni Bombita tan elegante como lo quieren pintar. De hecho, Ricardo no le perdonó a Joselito que le hubiera hecho retirarse y no perdía ocasión de zaherir al menor de los Gallos y devolverle la moneda. El modo muy sencillo: Ensalzando a Juan Belmonte más allá de lo razonable. En el fondo sus elogios al trianero eran puro reproche encubierto contra el de Gelves. No hay peor cuña que la de la misma madera.

1914-02-08 Entrevista a Bombita (Detalle)

Muy poco después de retirarse (el 8 de febrero de 1912) Bombita destacaba a Belmonte como torero y afirmaba que “pegará” siempre a Joselito. La profecía no se cumpliría pues, en realidad, el que más veces “pegaba” era José.

 

1913-04-24 Madrid Bombita Pastor Gaona y Joselito AS10893 - copia

Puerta de cuadrillas de la Plaza Vieja de Madrid el 24 de abril del año 13. Un bisoño pero sonriente Joselito se las veía con los veteranos Bombita, Pastor y Gaona.

Los toreros de hoy

Las rencillas de los toreros antiguos, reales o ficticias, son ya cosa del pasado y, hoy día, hemos pasado de un extremo al otro. A principios de la competencia de Joselito y Belmonte, los periódicos denunciaban el extraño comportamiento de los aficionados que abrazaban y besuqueaban a sus toreros preferidos. Hoy quienes se abrazan y besan son los propios toreros.

1914-03-15 (EH) Algunos besan a los toreros 

Ya se besa a los toreros

El primer enfrentamiento de Joselito y Belmonte como matadores de toros tuvo lugar el 15 de marzo de 1914 en Barcelona. Algunos apasionados espectadores llegaron a abrazar y besar a sus ídolos, José y Juan. La prensa se hizo eco del decadente (sic) hecho.

El comportamiento de Joselito con Bombita no es deseable, aunque el aficionado agradezca cualquier conato de pique como la reciente rencilla entre Perera y Fandiño, pero tampoco es deseable el extremo contrario, Los tiempos cambian y las buenas formas se imponen (o deben imponerse). Sin embargo entre las peleas de antes y los besos de ahora, hay mucho trecho.

La postura intermedia, como por ejemplo la de José y Juan quienes, cuando viajaban, se separaban al llegar a las estaciones para que sus partidarios no les viesen juntos, como contaba el propio Belmonte al periodista Chaves Nogales, puede ser la ideal pues mantener vivo el fuego y la ilusión de los aficionados es la primera obligación de los diestros.

Que es lo que hace, por ejemplo y sin ir más lejos, José Tomás con su actitud en la plaza y fuera de ella.

JT saluda a Morante

El saludo de dos grandes toreros

 

Nota: Este artículo se publicó inicialmente el 4 de este mes en Burladero.com

sábado, 14 de diciembre de 2013

Villancicos flamencos (XIV) A los cara, caracoles

Por Jose Morente

Mayte Maya

Mayte Maya

Llevábamos un tiempo alejados del flamenco (al menos en este blog) pero al acercarse la Navidad se impone volver a recordar algunos cantes flamencos por villancicos, tanto antiguos como no antiguos, que nos permitan encarar estas fechas como deben encararse que es con una cierta tranquilidad de espíritu. Y eso que las fechas navideñas, al final, son todo menos tranquilas.

Repasando las entradas de años antteriores me percato que no nos hemos acercado nunca a la Navidad granadina, a las celebraciones que se hacen en las cuevas del Sacromonte. Hora es ya de hacerlo.

Y nada mejor para ello, que ir de la mano de Mayte Maya, gitana del Sacromonte, hija de Bienvenido Maya y María “La Coneja” y sobrina de Tío Lili, Teresa maya, Juanele, El Chato y el Chispita. De la familia Maya “Cotorreros”

El villancico que canta aunque se incluyó como muestra del estilo en la Antología Flamenca que dirigió Perico el del Lunar (hijo) en 2002 es, en realidad, muestra del estilo personal de esta visceral cantaora que debutó en un tablao a la temprana edad de cuatro años.

Antologia flamenca Perico del Lunar hijo 001

 

Villancicos flamencos Mayte Maya

Antología Flamenca de Perico del Lunar, hijo (OFS, 2001)

 

 

Esta noche nace el niño

y yo le llevo un pandero

pa’ que cante un villancico

la nieta del Cotorrerro

 

(Estribillo)

Y a los caracoles, los caracolillos

y a los cara-caracoles te quiero un poquillo

te quiero un poquillo, te quiero de veras

Y a los cara-caracoles las caracoleras

 

La Virgen se está peinando

entre cortina y cortina

los cabellos son de oro

y el peine de plata fina

 

(Estribillo)

 

Con ella los gitanos se van al peso

Con ella los gitanos se van al peso

Y se llevan la bota de vino bueno, de vino bueno

Y se llevan la bota de vino bueno, de vino bueno

 

(Estribillo)

 

La Virgen hizo un potaje

y no le echó tomate

y San José le decía

si lo pruebo que me maten

 

(Estribllo)

 

Y esta noche es Nochebuena

y mañana, Navidad

Saca la bota María

que me quiero emborrachar

 

(Estribillo)

martes, 3 de diciembre de 2013

Una fecha errónea, una tarde histórica y un traje de hilo negro (4ª parte y última)

Por Jose Morente

s.f. Joselito Valencia traje hilo negro (Archivo Huguet) - copia

Jose Gómez Ortega “Joselito el Gallo” con el traje de hilo negro (en este caso celeste y negro) que reservaba para las tardes de compromiso.

Un terno de hilo negro

Empezábamos esta mini-serie, perplejos al descubrir que una vieja película de toros que circulaba en la red, con fecha errónea, contenía imágenes de un tercio de quites de Juan Belmonte, Rodolfo Gaona y Joselito el Gallo.

De la sorpresa pasábamos a la emoción que supone revivir una de las tardes más gloriosas del belmontismo. La tarde de la miurada en la feria de abril sevillana en la que Juan y José se vieron las caras por vez primera en su tierra y ante un testigo de lujo.

Y entre tantas emociones fuertes aparecía como detalle exquisito, delicado y antiguo, el de un terno de hilo negro. El terno de hilo negro (celeste y negro) que vestía ese día el menor de los Gallos.

1914-04-21 Sevilla (p. SyS) Joselito en el cuarto - detalle

Joselito en la tarde del 21 de abril de 1914, en un quite al cuarto toro, Jabato, del lote de Gaona (Fotografía de Sol y Sombra. La fotografía en blanco y negro no nos permite apreciar el color del terno de José

El sabio y el fenomeno pag. 31 001

Sin embargo, El Bachiller González de Rivera y Triquitraque nos aclaran en su libro “El sabio y el fenómeno en 1914” que Joselito vestía esa tarde “a la antigua usanza” un “terno celeste con alamares de seda negra”.

Un terno celeste con alamares negros que Joselito pudo estrenar, probablemente, ese mismo día y que por ser de hilo era mucho más ligero que aquellos pesados trajes de torear de principios del pasado siglo.

Joselito detalle traje

El terno clásico, cargado de oro que se utilizaba habitualmente era muy pesado e incómodo

Por eso, por lo ligero, Joselito, gustaba de reservar ese traje para las ocasiones de más compromiso. Para aquellas tardes en que todo se hace cuesta arriba como son las corridas de Miura o esos paseíllos en solitario al frente de las cuadrillas que tanto gustaba prodigar el de Gelves.


Los seis toros de Contreras en Valencia.

No tiene, por eso  nada de extraño que Joselito guardara ese vestido en el armario para no volver a utilizarlo hasta su última corrida de la temporada, la tarde en la que se encerró en solitario con 6 toros de Contreras en Valencia, el 18 de octubre, y la tarde a la que, creo, corresponde la foto que encabeza esta entrada.

Ese día José utilizó también el mismo terno celeste y negro que había vestido en la miurada sevillana, como atestiguan las crónicas de la corrida.

1914-10-18 (p. 19 Revista Moderna) Joselito terno celeste y negro 00

En la descripción del ambiente de la “Revista Moderna” que se publicaba en Valencia, se hacía hincapié en el color (“celeste y negro”) del “trajecito”

1914-10-18 (p. 26 AT) Valencia Joselito 4º 001

Joselito, con el terno celeste y negro, ante el cuarto toro de la encerrona valenciana. Un toro de Contreras (encaste Murube) de presencia nada apabullante y con los pitones escobillados (fotografía publicada en Arte Taurino)

De ese día tenemos la suerte de disponer de una vieja cinta cinematográfica que recoge (igual que en la tarde de los toros de Martínez en Madrid) la lidia de cuatro astados.

En el tercero, “Algabeño”, Joselito estuvo sensacional abundando en desplantes y tocaduras de pitón por lo que le dieron la oreja (o las dos orejas y el rabo según quien sea el revistero que reseña la corrida).

1914-10-18 (p. 5-XI SyS) Valencia Joselito 3º 001

Joselito le coge el pitón a Algabeño

Vemos un fragmento de la faena a “Algabeño” con un desplante muy curioso y muy característico del hijo de la Gabriela: Joselito, de rodillas, saca un pañuelo del bolsillo de la chaquetilla y se seca el sudor, en demostración de tranquilidad y seguridad en la cara del toro. Era lo que los aficionados intransigentes de la época llamaban “monerías”.

Vemos la “monería” pero también el principio de la faena. Joselito torea, por alto y por bajo, con la suavidad que le era propia.

 

Fragmento de video restaurado por el Instituto Valenciano de Artes Cinematográficas (IVAC)

 

Un “tour de force” a mitad de la temporada del año 15 

Acabada la temporada del 14, el traje volvería otra vez al armario para permanecer en él hasta agosto del año siguiente (1915) cuando Joselito se encerró, en una semana, la friolera de 3 tardes en solitario: el día 22 en San Sebastián (con 6 toros de Santa Coloma); el 24 en Almagro (con 6 toros de Murube) y el 26 en Alcalá de Henares (3 toros para él y uno para su cuñado El Cuco),

Fue la que llamó el Sol y Sombra “La semana grande de Joselito-1915

1915-09-02 (p. SyS) La semana grande de Joselito 001

En dos de esas tres tardes, Almagro y San Sebastián, José volvió a utilizar ese terno celeste y negro.

Primero en San Sebastián

1915-08-22 (p. 1916-03-14 TyT) Joselito veronica

Joselito veroniqueando en San Sebastián (Fotografía publicada en Toros y Toreros)

1915-08-22 (p. LL) San Sebastian Joselito color traje

La entradilla de la reseña en La Lidia

Y luego en Almagro

1915-08-24 (p. SyS) Almagro Joselito cite 001

Joselito citando y ofreciéndose al toro en Almagro

1915-08-24 (p. ElH) Almagro Joselito celeste y oro

Y la reseña del Heraldo de ese día con la referencia al terno celeste y negro

 

Los Santa Coloma de Sevilla

Sólo un mes más tarde, a finales de septiembre, Joselito se volvería a anunciar en corrida en solitario. El día 30, Joselito se encerraba con 6 toros de Santa Coloma pero esta vez, nada más y nada menos que en Sevilla, en la feria de San Miguel.

Como la corrida era de mucho compromiso estaba clara la necesidad de utilizar un terno ligero pero, para esta ocasión (gloriosa pues cortaría la primera oreja que se daba en la plaza de la Maestranza), Joselito decidió estrenar traje.

El traje de Joselito ese día, un traje de estreno, mantenía idéntico dibujo de hilo negro que el traje que venía utilizando desde la temporada anterior, aunque esta vez con color lila (o violeta) no celeste.

1915-09-30 Joselito y Cantinero Verónica (2)

1915-09-30 Joselito y Cantinero natural

1915-09-30 (p. 10-06) Mundo Grafico Joselito gana la 1 oreja Sevilla 005

En las fotografías de esa tarde también histórica (la última fue publicada en Mundo Gráfico) se puede observar perfectamente el detalle del diseño de los bordados del traje de Joselito. Son los mismo que los del traje celeste y negro que venía utilizando ese año pero, esta vez, de color lila, algo que no es posible apreciar en las fotografías en blanco y negro.

1915-09-30 (p. 1-XI ABC) Joselito violeta y negro

La reseña de la lidia del primero de la tarde en ABC con la descripción del color del traje de Joselito: Violeta o lila

Ese traje violeta (o lila) con adornos negros, lo conservan todavía, guardado como oro en paño, los descendientes del presidente de aquella corrida, Don Antonio Filpo.

1945-05-16 (p. Ruedo ext.) Antonio Filpo

El presidente de la corrida, el abogado sevillano don Antonio Filpo (El Ruedo extraordinario del 16 de mayo de 1920). En la mesa una foto de Joselito.

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El traje lila y negro que lució Joselito el día que cortó la primera oreja que se daba en Sevilla y que conservan los descendientes de don Antonio Filpo (Fotografía del blog "La Sevilla que no vemos" de Julio Domínguez Arjona)

s.f. Joselito Valencia traje hilo negro (Archivo Huguet) (3)

 

s.f. Joselito Valencia traje hilo negro (Archivo Huguet) (4)

Resulta muy curioso comparar los detalles del bordado del traje lila y negro de la primera oreja (foto en color) con los del traje celeste y negro (que fue el que utilizó Joselito en Valencia y que vemos en las dos fotos de abajo). Son idénticos

Sus familiares conservan también la cabeza del toro Cantinero que fue el de la polémica oreja. Polémica porque rompía una tradición de décadas, no porque nadie dudara del mérito de la faena de Joselito.

De hecho, Don Criterio, el crítico del Liberal de Sevilla y uno de los que más protestó de la concesión de ese trofeo fue quien pidió, años después redactar el píe de la placa que está bajo la cabeza de Cantinero.

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"CANTINERO" Número 131
Negro lucero de la ganadería de Santa Coloma , lidiado el 30 de Septiembre de 1915 en la Plaza de la Real Maestranza. "Joselito" que actuaba como único espada hizo quites grandiosos, poniendo después tres monumentales pares de banderillas . Practicó una estupendísima e inenarrable faena de muleta que inició con el pase llamado de la "muerte", coronando tan brillantísima y archivable faena  con un volapié soberbio. las ovaciones fueron constantes y atronadoras Los espectadores agitaban sus pañuelos pidiendo la oreja y ante la entusiasta insistencia de aquellos, la concedió  el concejal Señor Filpo que presidia la corrida , siendo la primera que se otorgaba en la plaza sevillana . ANTONIO REYES "DON CRITERIO"

 

Reaparece el terno celeste (y negro)

Estrenado con gran éxito el lila todo hacía suponer que el celeste y negro se quedaría para siempre en el baúl o que sería regalado a algún novillero en agraz

Sin embargo, cuando un mes más tarde, el 17 de octubre de 1915, Gallito se encerraba otra vez en solitario en Valencia y, esta vez, nada más y nada menos que con 6 toros de don Eduardo Miura, decidió recuperar nuestro conocido terno celeste con adornos negros.

Y es que, ese traje celeste acairelado en negro, había “toreado” ya Miuras y corridas en solitario, Y aunque más gastado que el nuevo traje lila, quizás por eso –por lo gastado-, podría resultar (en tarde de doble papeleta: Miuras y en solitario. ¡Ahí es nada!) más cómodo de llevar que el otro más nuevo.

1915-10-17 (p. 15-XI ET) Joselito terno 01

Si algo no ha cambiado en el toreo es el afán de criticar por criticar de algunos aficionados, como aquellos que –en 1915- reprochaban a Joselito usar un terno más ligero para este tipo de corridas. Un sinsentido denunciado por el corresponsal del Toreo

La tarde fue triunfal para Joselito aunque los toros (a fin de cuentas Miuras) no le ayudaron mucho. José estuvo muy valiente (lo que en él era lo habitual) tanto que por arriesgar mucho, en un ayudado por alto al primer toro recibió un palotazo en el vientre que le desarregló o rompió el chaleco.

Pero además, cuando al terminar la faena Joselito llegó a la barrera se vio que tenía rota la taleguilla a la altura de la ingle.

 

1915-10-17 (p. SyS) Valencia Miura Joselito 1º

1915-10-17 (p. 15-XI ET) Joselito terno 01

Ayudado por alto de Joselito a “Carbonero”, primero de la tarde. Al derrotar, el toro le rompió el chaleco y la taleguilla por la ingle (Reseña del diario ABC)

Rota la taleguilla del terno celeste y negro, por el primer Miura de Valencia, Joselito no volvería ya a ponerse ese traje que quedó inservible por lo que, en la siguiente ocasión propicia, volvería a usar de nuevo el terno lila con caireles negros que había estrenado el día de la primera oreja sevillana.

1916-08-09 (p. 14 LL) Vitoria Joselito uno de los toros

Joselito con el terno lila y negro en Vitoria, donde toreó en solitario el 9 de agosto de 1916.

1916-09-11 (p. LAcc) Joselito lila y negro

Y el mismo terno lila y negro en Salamanca donde Joselito volvió a torear en solitario un mes más tarde, el 11 de septiembre del mismo año.

 

Una vieja película de Joselito

Ese 17 de octubre del  año 15, en Valencia y por mor del primer Miura de la tarde acabó la historia del terno celeste con adornos negros que Joselito había vestido  -además de ese último día- en sus anteriores encerronas de San Sebastián y Almagro (ambas en agosto del 15 con toros de Santa Coloma y Murube) y.de Valencia (justo un año antes, en octubre del 14 con toros de Contreras),

Era el mismo terno que Joselito habría estrenado  en Sevilla en la corrida de Miura de la feria del año 1914 alternando con Gaona y Belmonte.

En la filmoteca de GAN, hay una vieja película de Joselito donde esté posa para la cámara y la posteridad vestido de torero antes de salir para la plaza y donde José luce uno de esos ternos de hilo negro que utilizaba en las grandes ocasiones. En la película se nos dice que las imágenes corresponden a la etapa de novillero del diestro de Gelves.

No lo creo. En mi opinión, lo más probable es que esa película esté filmada también la tarde del 21 de abril de 1914, la tarde de los miuras sevillanos en la que triunfó apoteósicamente Juan Belmonte y de la que ha llegado a nosotros un fragmento del tercio de quites del primer toro. La tarde en la que Joselito podría haber estrenado ese terno celeste acairelado en negro,

Con esa imagen de un Joselito sonriente, vestido con terno de hilo negro antes de ir a la plaza, despedimos esta mini-serie.

Joselito antes de ir a la plaza