Levantar el palo

Por Jose Morente

Madrid. 17 de mayo de 2015. Tercer toro. Oscar Bernal le "quita el palo" al toro del Montecillo después de marcar el puyazo

Madrid. 17 de mayo. Suerte de varas del tercero de la tarde 

El tercer toro de la tarde, que corresponde a Joselito Adame, entra por segunda vez al caballo de Óscar Bernal. Los comentaristas del plus comentan:

- ¡Que bien lo ha cogido!

- ¡Muy bien!

- Y, fíjate, además le levanta el palo Óscar Bernal

- No se lo levanta, se lo quita. Cosa que no gusta mucho en Madrid

Una enseñanza de Luis Miguel Dominguín

Entre las muchas y sabrosas anécdotas que cuenta el gran varilarguero Pepillo de Málaga de su vida profesional, hay una que viene muy a cuento de las imágenes que acabamos de ver.

Hace ya unos cuantos años y en su primera época de picador, Pepillo iba a las órdenes de Luís Miguel Dominguín. En una de las primeras tardes que acompañó a este genial torero y viendo la flojedad de uno de los toros que le tocó picar, el gran varilarguero le quitó el palo después de marcar el puyazo.

Luís Miguel le dirigió una mirada seca pero no le dijo nada.

Ya en el hotel y después de haberse duchado, el mozo de estoques de Luis Miguel llamaba a la puerta de la habitación de Pepillo diciéndole que el maestro quería verle.

Cuenta Pepillo que, aunque acudió de inmediato, subió a la habitación del torero con cierta preocupación.

Una vez delante de Luis Miguel, y después de un sobrio saludo, este le preguntó que porqué le había quitado el palo a ese toro.

Pepillo le contestó:

- ¡Maestro, es que noté que el toro no tenía fuerzas!

Luis Miguel tajante y seco, le replicó al varilarguero:

-¡Mal hecho! Al toro hay que picarlo. No quitarle el palo. Si no tiene fuerza es problema del ganadero. ¡Que los envíe más fuerte!

Y continuó el maestro madrileño, rematando la lección con su tremenda sabiduría:

- Si el público ve que el picador quita el palo, no le da importancia al toro.... Pero luego el que se juega los muslos delante del toro... soy yo. Así que la próxima vez, ya lo sabes, Pepe, el palo en el morrillo.

Así que ya sabemos, si no queremos quitarle importancia al toro, el palo en el morrillo (máxime en Madrid, donde lo contrario no gusta). Pero que no se nos olvide nunca que, tanto en Madrid como en Pekín, para quitar el palo tienen que echarle mucho valor tanto el picador como el torero. 

Pepillo de Málaga "levanta el palo" para citar a un toro en Sevilla, en terrenos próximos a la Puerta del Príncipe con su buen estilo de gran picador y gran caballista.