Las guerras carlistas un fragor similar a la campaña del norte que desencadenó José contra Bombita.
La campaña del norte
Joselito toreó en Bilbao, el 31 de julio de ese año de 1913, la corrida de la Prensa, con Antonio Fuentes y Cocherito como compañeros de cartel y con ganado de Guadalest.
Joselito, en el centro, haciendo el paseíllo en Bilbao el 31 de julio. Le acompañan Antonio Fuentes y Cocherito de Bilbao.Y también el novillero Lecumberri que no se ve en la foto y que mató una séptima res.
De este magnífico pase ayudado por bajo (que no por abajo) la prensa belmontista –sin embargo- decía que se trataba de un pase “esparrancado”.
Aunque Joselito estuvo sensacional, curiosamente ni él ni Bombita fueron contratados en el abono de ese año, que tuvo como base de los carteles a Machaquito, a Cocherito y a su hermano Rafael.
Hubo que esperar a San Sebastián para verlos otra vez enfrentados en plaza de importancia.
Magnífico ambiente el que presentaba la plaza de San Sebastián en una de las corridas de ese año de 1913.
En San Sebastián, hubo de todo como en botica, pero lo mejor llegó en la última corrida extraordinaria de Palha en la que Bombita estuvo muy por debajo de los Gallos.
Y es que Ricardo no pudo rehuir esta vez la corrida de Palha. Y eso que la empresa de San Sebastián le era afín. De hecho, a principios de temporada estaba previsto que Bombita torease en San Sebastián las corridas de Murube, Saltillo, Parladé, Santa Coloma y Guadalest. Dejando a los Gallos las duras de Miura, Pablo Romero y Palha. Aunque al final y por compromisos con la empresa, Bombita tuvo que torear también la de Palha.
Lo peor no fue eso sino que Bombita se enteró que, antes de comenzar este abono del año 13, la empresa ya había apalabrado y escriturado con José y Rafael las ocho corridas de abono del venidero año 14, mientras que a él nadie le había dicho aún nada.
Ricardo empezó a acariciar entonces la idea de retirarse. La Prensa se hizo eco de la noticia que, como es habitual, cada cual interpretó como le convenía.
A principios de septiembre, Palmas y Pitos sacó en portada la foto del torero y, dentro, un sustancioso artículo titulado “Bombita se retira”.
La misma semana The Kon Leche, daba también la noticia de la retirada de Ricardo
Al conocerse la noticia de su retirada empezaron los homenajes anticipados. Quien inició la moda fue el Gallo, que en San Sebastián le brindó un toro el día 9 de septiembre.
También empezó la moda de los banquetes, como el que se le dio en Barcelona, el 12 de octubre día en que toreó su última corrida en esa plaza.
Bombita se retira definitivamente.
Su despedida fue en Madrid, última corrida que toreó en su vida y que se celebró el día 19 de octubre de ese año de 1913.
Última foto de Bombita vestido de luces en el estudio del fotógrafo pocos días antes de su despedida.
Bombita estuvo sensacional esa corrida como sensacional estuvo Joselito, quien le estuvo apretando hasta el final, llegando a ofrecerle banderillas en el último toro aunque Bombita expresamente le había pedido que no lo hiciera, petición que un Joselito vengativo hasta el final ignoró.
Los dos salieron a hombros de la plaza. Por cierto, que los partidarios de Bombita le medio desnudaron al querer arrancarle los alamares de la chaquetilla para guardarlos como recuerdo.
No hay nada nuevo bajo el sol.
Bombita descabella al último toro que mató, Cigarrón de don Salvador García de la Lama. Joselito, a la izquierda de la foto, observa atentamente a su rival. Testigo de su retirada, le acecha hasta el final.
Una foto famosa. La vuelta al ruedo de Bombita después de la muerte de Cigarrón a hombros de los toreros quienes también portan una pancarta de agradecimiento al creador del Montepío Taurino, que fue sin duda “su mejor faena”.
Año después se repetiría algo parecido (también por lo triunfal de la tarde) en la despedida de Marcial Lalanda, continuador de la obra de Bombita en el Montepío, quien toreó junto a un bisoño Pepe Luís Vázquez.
La despedida de Marcial, también a hombros de sus compañeros
El cartel de la despedida de Bombita que sufrió varias modificaciones. Al desechar los toros de Benjumea se sustituyeron por otros de Salas. Tampoco toreó Juan Belmonte, lesionado tres días antes en su alternativa, al haberse resentido de una anterior cogida. Le sustituyó Regaterín.
Joselito, nombrado Papa-Rey, toma el mando del toreo.
Los días 5 y 8 de noviembre de 1913 se celebraron en Sevilla, en la huerta del Lavadero del padre de Ignacio Sánchez Mejías, sendos festivales para celebrar el santo de Rafael. Del primer día hay una foto celebérrima y muy reproducida donde se ve a los Gallos con don Eduardo Miura. La foto es la siguiente.
La foto del día de marras. Fernando, Rafael y José con Eduardo Miura, el temible ganadero de las patillas (Del imprescindible libro Joselito, el Rey de los toreros de Paco Aguado).
Así es como esta foto se ha reproducido normalmente. Los tres toreros del gallinero y Don Eduardo Miura.
Sin embargo, lo curioso es que la foto original que se publicó en el semanario Sol y Sombra del día 13, incluye a un quinto personaje situado a la izquierda de Joselito y que ha sido suprimido en la mayor parte de las reproducciones. El personaje misterioso es, nada más y nada menos, que Don Julián Echevarría (el famoso Julianón), empresario de la plaza de toros de Madrid.
Aquí está la foto original y completa, tal y como fue publicada en el Sol y Sombra del 13 de noviembre del año 13. A la izquierda de Joselito, Don Julián Echevarría, empresario de Madrid.
Sólo menos de un mes antes, Joselito acaba de echar a Bombita del toreo. Está a punto de tomar el mando absoluto de la Fiesta y se sitúa para la fotografía entre el más afamado ganadero, Miura y el empresario de la Plaza más importante del mundo taurino, Madrid. Todo un símbolo.
Joselito entre Don Eduardo, el ganadero de los Miuras, y Julián Echevarría (Julianón), el empresario de Madrid. Joselito es (o está a punto de ser) en esos momentos el amo absoluto del toreo.
Sol y Sombra publicaba esta fotografía de Joselito, en el citado festival del día 5, esperando muy tranquilo la muerte del toro Revoltoso, colorado y mogón, de la ganadería de su amigo José Anastasio Martín. Joselito cerró este día sus contratos para la siguiente temporada madrileña con el empresario de esa plaza, Julián Echevarría.
Siguiendo el ejemplo de Bombita, también se retirará del toreo, en esos días, el valiente Machaquito.
El 21 de octubre se cortó la coleta Machaquito, a quien vemos con su esposa después del “descoletamiento”.
Retirados Bombita y Machaquito, Joselito se encuentra convertido en el amo absoluto del toreo. Aunque no tan absoluto como pensaba, ya que José no contaba con la huéspeda que, en este caso, se llama Juan Belmonte quien, pese a su calamitosa alternativa en Madrid pocos días antes de la retirada de Bombita, le plantará cara durante las siguientes temporadas.
Épicos serán –sobre todo- los dos años venideros, 1914 y 1915.
Comienza la edad de oro del toreo.
Este es un anuncio aparecido en el The Kon Leche del 21 de julio de 1913. A lo largo de todo el año, se seguirá anunciando la pronta aparición de un libro sobre los nuevos fenómenos Joselito y Belmonte. Lo curioso del caso es que en ese momento si bien José es ya matador de alternativa, Juan sigue siendo novillero (lo será hasta finales de temporada). Sin embargo, la prensa y los públicos los emparejan y todo el mundo está ansioso porque estalle la competencia entre los dos. Competencia que –con sus matices- llenará las siguientes temporadas.
Muy bueno.
ResponderEliminarPocho Paccini
ResponderEliminarMuchas gracias y un abrazo
Según mis mayores esa fue la pareja más competitiva del Siglo XX
ResponderEliminara un que despues hubiese varias, como Pedres-Juan Montero, El Litri y Julio Aparicio, Luis Miguel-Antonio Ordoñez.... La rivalidad es buena pero más en el Toreo, ¡No Morente?.
Evidentemente, Juanito.
ResponderEliminarTiene usted razón. Gregorio Corrochano comparaba el toreo con el fútbol y decía que la ventaja de este deporte sobre la fiesta, es que el fútbol tiene "dos porterias".
Decía que las competencias entre dos toreros venían a ser como las dos porterías un campo de fútbol.
Sin competencia, la fiesta pierde muchos enteros. Cuando un torero ha dominado su época sin nadie que le haga sombra, el clima taurino baja bastantes enteros: Guerrita, Manolete, etc.
Hoy quizás sea lo que más podemos echar en falta: un par de toreros
que polaricen el interés de los aficionados.
Un abrazo
Bonjour, José. Je viens de lire (tardivement) cette entrada fort intéressante, et les commentaires sur les rivalités entre deux toreros. Tout ce qui a été dit est évidemment très exact, mais je voudrais ajouter une nuance. Les époques de suprématies entre deux toreros, bien que passionnantes, ne sont peut-être pas les plus favorables aux évolutions : les deux as s'observent, se critiquent, rivalisent entre eux deux. Tout repose sur les capacités créatrices de ces deux seuls acteurs. Quand ils s'appellent Gómez et Belmonte, tout va bien, mais, même les génies ne peuvent pas se renouveler constamment. Les autres toreros, écrasés par les deux géants, passent inaperçus et n'ont d'autres possibilités que de plagier les deux figuras, plus ou moins bien.
ResponderEliminarLorsque prennent fin ces périodes, on assiste à l'éclosion de talents nouveaux qui se libèrent de la domination des figuras majeures et peuvent sans complexe laisser leur envie d'inventer, de créer, d'innover. Ils le font avec d'autant plus de liberté que les aficionados, en quête de nouvelles figuras, peuvent observer, apprécier, juger sans fixer nettement leurs préférences. Les rivalités entre prétendants au trône vide sont une source nouvelle d'émulation. Le grand public, qui aime bien aller vers ce qui est établi, y perd, mais l'aficionado exerce alors son talent d'observateur et de découvreur de talent. La période qui a succédé au grand mano a mano José-Juan, est exemplaire : pas d'empereur du toreo, mais quantité de princes qui tentèrent de s'illustrer, de se faire remarquer sans craindre la comparaison avec les deux génies (Belmonte menant une carrière moins assidue). Ce fut un temps très riche, très varié et favorable aux évolutions et changements par la diversité.
Dis-moi ce que tu en penses? Un abrazo
Jack Coursier