sábado, 3 de septiembre de 2016

Cuaderno de notas (CII) El natural rodilla en tierra según Ortega Cano



"Analizando la fotografía pueden verse varias circunstancias importantes: al toro se le torea con las yemas de los dedos, que son las que sostienen la muleta, y se le lleva embebido en los vuelos, sin agarrotamiento alguno ni en la muleta ni en mi muñeca. Este toreo no podría hacerse si al toro y a la muleta no se le trata con delicadeza, pero también con firmeza, que no son incompatibles.

Torea todo el cuerpo, no sólo las manos. Torea la mitad inferior de mi cuerpo, que está fibroso y tenso, y aunque ahí se está cargando el peso, no está agarrotado. Y torea la mitad superior, que está en una postura completamente distinta a la que tienen las piernas. De la faja para arriba todo es relajación y naturalidad, desde los hombros hasta la cabeza y la cara, que con la mirada sigue el viaje del toro. Y el brazo que manda, tampoco agarrotado, y la mano que sujeta la espada, que no la aprieta, sino que la sostiene levemente, como indicándole al toro por donde tiene que ir.

La conjunción de todas estas cosas, de la parte fibrosa y de la parte relajada del toreo, es lo que hace que este sea grande."

Comentario de ORTEGA CANO en RAMÓN, José Luis, "Todas las suertes por sus maestros" (1ª ed., Madrid, Espasa Calpe S.A., 2000. Págs. 267 y 268
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Addenda: Si bien a este natural, José Luis Ramón, lo denomina en su libro natural por bajo (y lo es), he preferido denominarlo natural rodilla en tierra para evitar confusiones pues conviene recordar que el ayudado por bajo, por ejemplo, se da con el cuerpo erguido.

Bonus Track: El pasado domingo 21 de agosto, el diestro Javier Jimenez abría la Puerta Grande de las Ventas con una magnífica actuación donde desgranó una verdadera sinfonía del pase natural. Broche de la misma fue una de las postreras tandas a su segundo toro donde, entre una trincherilla y un pase de pecho (¡todo con la izquierda!), intercaló el natural de rodillas del que nos hablaba Ortega Cano en el libro de José Luis Ramón. Sensacional.

Lo vemos.


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